El uso del brasier


¿Cuánto tiempo del día usas brasier?


 Y en la noche, ¿duermes con él? ¿Tienes uno puesto hasta cuando estás sola?

Después de leer este artículo, querrás desabrochártelo…

Durante años se han estudiado las causas del cáncer de mama, mala alimentación y falta de ejercicio han sido las principales culpables hasta ahora de esta enfermedad, que lamentablemente ha matado a la mayor cifra de mujeres en las últimas décadas.

Mujeres totalmente vegetarianas y amantes del ejercicio, también fueron infortunadas víctimas del cáncer de mama.

En una de las tantas investigaciones, se descubrió que las mujeres que padecían esta enfermedad, tenían antecedentes de uso de sostenes más apretados y por más tiempo que las mujeres que no habían desarrollado (aún) la enfermedad.

De hecho, todas las mujeres con cáncer usaban sostén por más de 12 horas diarias.
Cuando usas el brasier apretado, tus senos son oprimidos y las vías del pecho a los nódulos linfáticos se cierran, lo que provoca que acumules líquido, se ablande el tejido y se formen quistes.

Las toxinas de nuestro organismo son desechadas a través de las vías linfáticas. Sin embargo, cuando los senos son constreñidos por un brasier ajustado, éste no puede realizar el proceso de limpieza correcto, lo que deriva en una anulación de toxinas en los pechos.

El uso del sostén hace que los senos se vuelvan más débiles y esmirriados, porque así, los pechos se hacen dependientes del soporte artificial de éste y el cuerpo pierde su habilidad por sostenerlos por si mismos.

Esta es la razón por la que muchas mujeres se sienten incómodas sin brasier. Entonces, ¿cuál es la solución? No lo uses apretado. Y de preferencia, duerme sin uno. Existe un lapso de tiempo alentador de recuperación del cáncer de mama fibroquístico: de 10 días a 2 semanas sin usar el brasier. Muchas de las mujeres que han dejado de usar el brasier, han constatado una mejora milagrosa en su salud.

Ya no es un acto feminista la quema del brasier. Ahora es una batalla entre la vida y la muerte.

No olvides recordar la importancia y urgencia que tiene el tomar conciencia del cáncer mamario.