Con el ritmo de vida que llevamos, de casa al trabajo y del trabajo a casa, mantener una rutina saludable de ejercicios físicos ya no es excusa para sedentarios, sino que una triste realidad.
Si la falta de tiempo es la principal culpable por la falta de actividades físicas en tu vida, puedes ajustar el horario de la comida para acudir a un gimnasio cerca de tu trabajo.
Este periodo es excelente para entrenar y 40 minutos son más que suficientes para que logres buenos resultados. Además, volverás a la oficina con la sensación de misión cumplida y con mucho más energía para seguir trabajando, el cuerpo libera endorfinas al hacer ejercicios y estas son las responsables por ofrecer más disposición.
Si no sabes cómo organizar tu tiempo para hacer ejercicios en la hora de la comida, te dejo con unos consejos muy útiles que te ayudarán a conseguir este objetivo:
Lo primero es dejar claro que hacer ejercicios en la hora de la comida no quiere decir que tienes que dejar de comer. La alimentación correcta es esencial para quien practica ejercicios, además si entrenas sin comer puedes pasar mal y hasta desmayar. La mejor opción es comer algo ligero una hora antes de tu entrenamiento. Prefiera comer algo ligero una hora antes del entrenamiento y después de los ejercicios coma tu comida normal, evitando siempre exceso de grasas, pastas y salsas muy pesadas.
Habla con tu instructor del gimnasio que no dispones de mucho tiempo para hacer el entrenamiento, así podéis organizaron una combinación de ejercicios que te ayuden a lograr tus objetivos en 30-40 minutos. Como el horario que dispones es corto, deberás tener disciplina y acudir el gimnasio al menos 3 veces por semana.
Prefiera entrenamientos leves, no exageres en los ejercicios, acuérdate que tienes todo el día por delante y que tienes que mantener la energía para el resto del día y las tareas laborales.
Antes de hacer la matricula en el primero gimnasio que veas, debes estar segura de algunos detalles: la ubicación del gimnasio deberá permitir que salgas del trabajo, llegues al local cambies de ropa, hagas al menos media hora de ejercicios, te duches y vuelvas a tu puesto de trabajo.
Eso quiere decir que debes tener, mínimo 1 hora para comer. El retraso de unos minutos dentro de ese horario no puede suponer un problema en tu trabajo, ya que seguramente tardarás un poco más en llegar.
Debes tener en cuenta que deberás reservar un tiempo para comer dentro de este horario, aparte de llevar ropas de deportes para cambiarte.
